Situado en una de las zonas más céntricas de Mataró, entre casas adosadas, el edificio parte de la idea de reformar una casa unifamiliar de 5 metros de luz y de planta baja y dos plantas piso. El objetivo se basó en entrar luz a unos espacios oscuros. El solar pertenece a una parcela ocupada por una vivienda con un patio de manzana de gran tamaño poco frecuente en las fincas del centro histórico. Se derribaron las construcciones existentes en el patio de manzana dejando un jardín privado para la construcción de una nueva piscina.
